JUAN FRANCISCO ALONSO

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Maduro: Capriles quiere llevar al país a la guerra civil

Pese a condenar lo ocurrido en la AN, culpó a la oposición de los golpes recibidos

El Presidente acompañó a los marchista a su paso por la avenida Nueva Granada MIGUEL GUTIERREZ/ EFE

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JUAN FRANCISCO ALONSO | 

 EL UNIVERSAL

jueves 2 de mayo de 2013  12:00 AM

"No pretendas apagar con fuego un incendio, ni remediar con agua una inundación". El presidente Nicolás Maduro parece que no ha escuchado esta frase del célebre filósofo chino Confucio, pues aunque ayer volvió a condenar los sucesos ocurridos en la Asamblea Nacional el martes y además llamó a los suyos a contribuir a que "cese la violencia en todos los espacios de la vida pública", lo hizo tras responsabilizar a la oposición y a su candidato, Henrique Capriles Radonski, de esos hechos y de calificarlos a ambos de "fascistas" por lo menos en doce ocasiones.

"El fascista mayor quiere llevar al país a una guerra civil", acusó el mandatario durante el discurso que dio a los miles de trabajadores que simpatizan con el oficialismo que se congregaron en la plaza O'Leary de Caracas para festejar su día. 

Acto seguido aseveró que los miembros de la bancada opositora buscaron que sus pares chavistas los golpearan. "Llegaron con cascos, con unos aparatos que se llaman paralyzer que echan gas para echárselo en la cara a los diputados y unas cornetas (...) Ellos empezaron a agredir primero a Diosdado Cabello, quien se quedó allí tranquilo e imperturbable y luego vino la sampablera", relató y agregó: "Lamento mucho los golpes que le dieron al diputado Julio Borges, pero después se puso de payaso a hacer un show en televisión, se echó por aquí no sé que cosa para le corriera (en alusión a la sangre que se le veía cuando declaró a Globovisión). Eso no es un diputado serio, lo mínimo que podía hacer era salir ya limpio y llamar a la rectificación, a aceptar su culpa, porque él inició la sampablera". 

El Jefe del Estado no se refirió a la decisión del presidente de la AN, Diosdado Cabello, de impedirle a los legisladores opositores hablar en las plenarias y en las comisiones y de suspenderles sus pagos, lo cual generó al protesta que la mayoría buscó acallar a la fuerza.

Aunque dijo que condenaba la violencia "venga de donde venga", consideró comprensible lo ocurrido. "Es difícil para los diputados nuestros que se les vengan a golpes unos fascistas, que le lancen sillas y que ellos se queden inmóviles".

El mandatario prometió que pasaría en cadena de radio y televisión los videos que tomaron las cámaras de televisión que había dentro del hemiciclo para demostrar que la violencia fue provocada. No explicó por qué los venezolanos no pudieron ver el hecho en vivo ni de quién fue la decisión de que las cámaras de ANTV comenzaran a mostrar el escudo que hay dentro del recinto y el tragaluz que adorna su techo.

"¡Basta de fascismo, de provocar violencia, irresponsable! Fascista mayor fuiste derrotado (en las elecciones del 14 de abril), acepta tu derrota. ¡Basta de pataleo, de lloriqueo! ¡Lloriqueador (sic)! Eso es lo que eres tú, un burguecito llorón y fascista que quiere llevar al país a la violencia", soltó.

Pese a que los medios públicos transmitieron extensamente la movilización oficialista, el discurso de Maduro fue emitido íntegramente en cadena. ¿La razón? "Los medios de la burguesía me tienen censurado".

Como lo hicieran en pocas ocasiones su antecesor, el fallecido Hugo Chávez, el Presidente denunció que hay un plan para derrocarlo, pero auguró que fracasará. "No volverán porque hay un pueblo unido y una Fuerza Armada que va a garantizar el futuro de esta patria libre, socialista, bolivariana, chavista, antiimperialista, democrática y cristiana".

Más de la mitad de la hora que estuvo hablando, el Jefe del Estado la dedicó a sus adversarios, ni siquiera ofreció detalles del esperado Reglamento de la Ley Orgánica del Trabajo, el cual firmó durante su alocución.